martes, 9 de diciembre de 2008

¡POR FIN! LA VERDADERA IDENTIDAD DE “SANTA CLAUS”



Es cierto que todos recordamos a ese hombre viejo, radicado en el polo norte, con un abdomen prominente, vestido de rojo con blanco y un peculiar sombrero, y una larga y rizada barba. Sin embargo, ese personaje es ficticio y producto del capitalismo de una empresa productora y comercializadora de bebidas gaseosa la cual lleva los mismos colores.

Aunque el origen de ese producto del capitalismo radica en la existencia de un personaje real e histórico, sobre el cual han recaído grandes historias y leyendas que expresan el carácter del Santa Claus que conocemos actualmente. Su momento histórico se ubica durante el siglo IV d. C., participó en el Concilio de Nicea y fue un fuerte opositor de la herejía arriana donde se niega la naturaleza divina de Jesucristo. Se trata de San Nicolás Obispo de Mira, mejor conocido como San Nicolás de Bari.

Ciertas historias cuentan que él subió a la chimenea de un hombre pobre para lanzar, en tres ocasiones distintas, bolsas llenas de monedas de oro, para que sus hijas pudieran casarse y tener mejor vida. En la segunda ocasión, por accidente su regalo cayó en el tendedero, enredándose en una prenda que se encontraba ahí. Cabe agregar que se le atribuye el milagro de resucitar a tres niños que yacían muertos dentro de un barril de sal.

Es por ese carácter caritativo y discreto, manifestado en sus historias, que su figura se asoció con ser patrono de los niños y de los marinos; además de relacionarse con el hombre que deja regalos para los niños en las chimeneas de las personas, aunque de manera secreta. Esto surgió en Alemania, Suiza y los Países Bajos, incluido el nombre con el que le conocemos: “Santa Claus”, pues en su idioma era llamado San Nikolaus.

San Nicolás si existe, pero no como nos lo ha hecho creer el consumismo y el capitalismo; la ilusión que los niños tienen no es una falacia, es real. Sin embargo, aquel que en esa época daba regalos a las personas es festejado el día 6 de diciembre y no el día 25 de diciembre, día en que festejamos los cristianos el nacimiento de Jesucristo.

Por: Fernando Moctezuma

lunes, 1 de diciembre de 2008

ES INÚTIL, NI LA HISTORIA ESTÁ EXENTA

Para el número presente quiero rescatar un tema que ha sido objeto de análisis, vivencia, arte y toda actividad propia del ser humano. Por ello es que ni la historia está exenta de contar anécdotas al respecto del tema de esta semana: el amor.

Sino compruébese, todo tipo de amoríos cambiaron, en la Edad Media y en la Edad Moderna, el rumbo de países enteros, como fue el caso de Carlos V de Alemania o Carlos I de España. Él estuvo casi al borde de lograr la misma extensión territorial que el Imperio de Carlo Magno, y mucho tuvo que ver su linaje, producto de los casamientos de sus ascendentes.

Sin embargo, en este caso, contrario al asunto de Carlos V, es inútil el dato “amoroso” que vamos a presentar; de nada nos sirve saberlo sino es acaso para ubicar un período determinado de la historia mexicana.

Para esto contamos con el apoyo de la Maestra María del Carmen Elizundia Ponce, catedrática de la Universidad Simón Bolívar. Ella nos proporcionó un dato curioso de la historia de México en lo que concierne al período en el que aparece el Ateneo de la Juventud.

En la entrevista nos comentó sobre a existencia de una mujer que ejerció el mecenazgo, aquí en la Ciudad de México, hacia los miembros del ateneo de la Juventud. Su nombre era Antonieta Rivas Mercado.

Ella entabló gran amistad con los ateneistas, y cuando heredó la gran fortuna de su padre se dedicó a una de las actividades ancestrales que se han visto a lo largo de los tiempos: financiar y patrocinar a los intelectuales y artistas de su época. Por si fuera poco se dedicó ala escritura y al teatro, siendo una gran promotora de la cultura en México.

Pero en el proceso, Antonieta se enamoró de uno de los miembros más importantes del Ateneo – aunque no para ese entonces –: José Vasconcelos. Hombre de muchas y potentes pasiones, quien para ese entonces se encontraba casado.

A pesar de ellos, Vasconcelos tuvo sus amoríos con Antonieta, aunque ella no fue nada más que una simple amante del filósofo mexicano. Se dice, que tal fue el sufrimiento de Antonieta que se suicidó en la catedral de Notre Dame.


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Así fue la historia de un amor, que como dijimos al principio, es un dato curioso bastante inútil, pero que nos demuestra, así como el ejemplo de Carlos V, que ni la historia se escapa del esencialmente humano, tema del amor.

Sin importar si su huella dejó un hito en la historia o es útil para algo de la vida cotidiana, el amor sigue y seguirá presente en sus diversas manifestaciones, en cada una de las actividades en las que el hombre participe, incluída la construcción de su destino, y la recopilación de éste, en los anales de la historia.

Por: Fernando Moctezuma

lunes, 24 de noviembre de 2008

VOLVIENDO A LAS RAÍCES: EL MISTERIO DE LA INTELIGENCIA

La inteligencia es un tema complicado y polémico, se ha dicho mucho sobre ella, se ha especulado de sus funciones y de sus alcances, de su capacidad y sus aplicaciones.

Se ha preguntado por su modo de proceder, incluso se ha planteado desde la psicología si la inteligencia es una o si podemos hablar de muchos tipos de inteligencia con base en la diversidad de actividades que el hombre puede realizar. Hasta se ha hablado de inteligencia emocional. E incluso se han preguntado si la inteligencia proviene del cerebro o es una actividad del espíritu, inmaterial.

Mucho menos ha escapado este tema al análisis filosófico y/o ideológico, sino revísese en la historia de la filosofía la existencia de dos corrientes filosóficas: racionalismo y empirismo, e incluso el idealismo.

Sin embargo, lo que no es una duda a este respecto, es que en la experiencia cotidiana y en el ámbito del dominio popular la inteligencia siempre está relacionada con la posibilidad del hombre de conocer las cosas, o de por lo menos dar orden a lo que vemos en el exterior. En ocasiones también se le asume como la posibilidad de aplicar algo que conocemos, a manera de ideas, en algo de la vida práctica y que nos resulte útil.

Pero quizá pueda dilucidarse este tema tan problemático a partir de dos recursos; uno de ellos imprescindible para todo hombre, y primordialmente del hombre que trabaja con las palabras, y trata de encontrar el sentido más originario de aquello que investiga o estudia: el recurrir a la etimología de la palabra que designa lo que investigamos, por ejemplo, como se hace para dilucidar la naturaleza de la biología. El segundo recurso es el uso de la analogía, es decir, para este caso en concreto, una especie de comparación que nos descubra con mayor facilidad aquello que pretendemos entender.

Antes de proceder al despliegue importante del artículo, es importante que el lector sepa que la analogía a emplear es una anécdota curiosa, de la cual no podemos garantizarle su legitimidad histórica, pero si como un dato desconocido que nos proporciona una luz para entender más acerca de la naturaleza de nuestra inteligencia.

Fiel a este procedimiento, la inteligencia viene del latín intus que significa dentro y de legere que alude al verbo latino leer; en síntesis significa “leer dentro”. De aquí, la analogía nos hará más claro el sentido del gran misterio de la inteligencia; curiosamente, este dato también se remonta a las raíces latinas, y se manifiesta en la práctica del ejército romano.

Se dice que en los tiempos de los antiguos romanos se conformaban las filas con los legionarios y entre cada uno de ellos existía un espacio por el cual se paseaban los generales romanos, dichos espacios se llamaban inteligencia.

Este tránsito por la inteligencia no era en vano, pues el objetivo de ese pasear por dentro de las legiones era observar a cada uno de los soldados en su atavío, el estado de su ropa, sus expresiones, sus gestos, su postura, su complexión, su actitud y muchas cosas más.

Los datos que obtenían de ese observar por dentro a las legiones les servían para hacer asociaciones, catalogar a cada soldado según sus cualidades y para usar esos datos que obtuvieron del análisis los soldados en la estrategia militar. Es decir, que relacionaban e integraban la información de cada soldado y lo colocaban en el lugar idóneo para la estrategia a realizar.

Espero que les sea útil, apreciables lectores, esta vuelta a nuestras raíces lingüísticas y culturales para poder entender mejor este misterio de tantos que se nos presentan en la vida.

Por: Fernando Moctezuma

martes, 18 de noviembre de 2008

LOS “MISTERIOS” DE FEBRERO DE 1913


Detrás de febrero de 1913 se esconden muchos datos históricos cuyo conocimiento deja manifiesto el giro y desarrollo tan importante que dio la historia de México, y más en concreto, el acontecimiento que llamamos: Revolución Mexicana.

Como todos sabemos para el 22 ó 23 de febrero, aproximadamente, José María Pino Suárez y Francisco I. Madero fueron encontrados muertos en las afueras de la Penitenciaría a la que eran trasladados después de cinco días de arresto en la Intendencia de Palacio.

Según la prensa de la época, el asesinato fue producto de un grupo armado que se defendió de una agresión y que huyo después del tiroteo, sin embargo, los periodistas no descartan la intervención de todos los grupos relacionados con el conflicto.

Según los informes, este atentado fue producto del plan firmado en la embajada de los Estados Unidos; en el que participaron mondragonistas, felicistas, reytistas, porfiristas, Victoriano Huerta como parte del ejército de los leales y el más importante, el embajador Henry Lane Wilson. Además de contar la famosa “Ley Fuga”, por la cual se les disparaba a los reos que pretendían fugarse de prisión. A este suceso se le conoce como el “cuartelazo de la Ciudadela”

Además, el Pacto de la Embajada también tenía como objetivos el desconocimiento del Poder Ejecutivo, siendo Huerta el presidente provisional, para dejar libre a Félix Díaz la oportunidad de subir a la presidencia constitucionalmente.

De este acontecimiento deriva otro – que parece, más que un misterio, un secreto a voces – la presencia del Secretario de Relaciones Exteriores: Pedro Lascuráin, a quien correspondía la presidencia legalmente después del apresamiento de Madero.

Sin embargo, su gobierno, acorde con nuestras fuentes (Tiempos de México, SEP) tuvo una duración menor de una hora, el día 19 de febrero de las 22:24 a las 23:20, momento en el que renunció al poder.

Durante su breve gobierno realizó un movimiento que decidiría el rumbo posterior de la Revolución: colocó a Victoriano Huerta como Secretario de Gobernación, al cual correspondía por ley, tomar la presidencia provisionalmente si es que no había presidente.

Aquí se escribe una página importante del desarrollo histórico de México, datos que a veces no son muy conocidos, pero que es importante rescatar porque responden de manera importante a la situación actual de nuestra Nación.

Por: Fernando Moctezuma

martes, 11 de noviembre de 2008

RENACIMIENTO: ROMANO HASTA EN COSTUMBRES

Para el presente número apreciables lectores les comparto un dato particular de una época romana, aunque no propiamente de la edad Antigua, sino remontada a los tiempos próximos a la Edad Moderna: El Renacimiento.

En ese sentido, es importante conocer que es el Renacimiento, quizá ya muchos lo sepan, pero, fue una corriente artística que surgió originariamente en Italia y que posteriormente se propago a otros territorios europeos.

Este movimiento fue influenciado por un fuerte humanismo junto con un abandono de los temas religiosos propios de la Edad Media, sumándole una gran valoración y rescate de la Edad Antigua, primordialmente un regreso a los clásicos grecolatinos; así mismo, fue contemporáneo de todos los descubrimientos geográficos y astronómicos de la época y de los avances en navegación.

Fue un fenómeno que se dio por etapas, en concreto dos grandes momento: el Quattrocento, en siglo XV y el Cinquecento en el siglo XVI. En tanto al primero podemos decir que a manera particular, dentro del contexto del Renacimiento, tuvo como centro de su desarrollo dentro de la ciudad italiana de Florencia y no ofreció tanto esplendor como la siguiente etapa.

Dentro del segundo período, el Cinquecento, comprendido dentro del siglo XVI, es cuando surgen grandes talentos y que el Renacimiento tuvo su mayor desarrollo y esplendor. El centro de este momento del proceso del Renacimiento fue la ciudad de Roma.

En ambas etapas hubo un fenómeno muy particular: un fortalecimiento del sentido cultural de Italia, así como también una práctica muy particular y de la cual no todos tienen dato sino hasta este período histórico: el mecenazgo.

Sin embargo, dicha práctica que consiste en apoyar, proteger y patrocinar las artes no es una novedad o algo exclusivo de la era renacentistas, sino que fiel a su contexto de rescate de los clásicos grecolatinos, confiere el nombre de “mecenas” a aquel que realiza dicha labor.

Las raíces grecolatinas del nombre “mecenas”, y de la práctica que implica ese nombre, radican en la existencia de un personaje romano cuyo nombre es Cayo Clinio Mecenas. Este hombre fue consejero del emperador romano César Augusto, y dentro de sus costumbres se observaba la de promover las artes y proteger a los grandes talentos de su época, sin interés o lucro alguno, como fueron: Horacio y Virgilio.

Así que ya saben, hasta en la costumbre de proteger a los artistas y talentos de la época el Renacimiento fue fiel al rescate de su fuerte herencia grecolatina, y más en concreto el recobro de una figura que ostenta de origen el nombre de un romano: Mecenas.

Por: Fernando Moctezuma

martes, 4 de noviembre de 2008

DÍA DE MUERTOS, SÍMBOLO DE MEXICANIDAD: SINCRETISMO Y BARROQUISMO

En esta publicación especial, vamos a rescatar una tradición que denota el barroquismo y el sincretismo religioso de los mexicanos, es decir, la conciliación de varios elementos religiosos. Como nos afirma en entrevista la Maestra María del Carmen Elizundia Ponce, catedrática de la Universidad Simón Bolívar. La Maestra Elizundia nos ha compartido sus conocimientos los cuales hemos complementado con investigación, este artículo es el resultado de ambos esfuerzos y fuentes de información. Espero les de una luz con respecto a la identidad nacional.

Se dice que es sincretismo debido a que es una celebración en la que se funden elementos de la época prehispánica y de las costumbres católicas que nos heredaron los españoles.

El elemento prehispánico se percibe en las ofrendas y en el gran colorido de las mismas en sus adornos y contenidos. Es una manifestación llena de simbolismo.

En general, las ofrendas tienen ciertos elementos comunes: por un lado el retrato de los difuntos a los que se va a festejar y esperar, los alimentos que eran del agrado de los difuntos, el camino de las flores de cempaxúchitl, los cirios y veladoras (elemento español), la imagen de las ánimas del purgatorio (elemento español), el conocido pan de muerto, juguetes, bebidas alcohólicas cruz de sal y otra de ceniza (elemento español), etc.

Dichos elementos se realizan bao la creencia de que los muertos tienen permiso de visitarnos una vez al año. Se cree que el primer día es para los niños y el segundo para los adultos.

Esta ofrenda es respetada hasta el día dos por la noche, pues antes es sólo para el disfrute de los muertos.

El barroquismo radica precisamente en la gran cantidad de elementos que se funden y en el tremendo adorno de las ofrendas. Incluida la gran diversidad que hay en las ofrendas según las costumbres de cada tierra.

Pero, el sincretismo radica no sólo en la integración de elementos españoles; sino en la unidad de las tradiciones católicas de los españoles junto con el culto a los muertos del mundo prehispánico.

Bajo ese argumento, tenemos la costumbre de festejar a todos los santos el día dos de noviembre y el festejo de los fieles difuntos en el día primero. Según estas tradiciones, se busca hacerles misa a nuestro difuntos y rezar por ellos para que sus almas puedan descansar en paz y salir más rápido del purgatorio. O bien, se tienen la costumbre de estar todo el día con nuestros muertos en el panteón, yendo a rezar por ellos y dándoles una pequeña visita.

Así es a grandes rasgos el día de muertos y la mexicanidad que encierra tras sus formas y colores. Una identidad que no se limita al hombre prehispánico como mexicanismo puro, pero tampoco a una repetición de la cultura española; sino a la mezcla de dos perspectivas que se funden y complementan en una sola: el tradicional Día de Muertos.


Por: Fernando Moctezuma

martes, 28 de octubre de 2008

JACOB Y ESAÚ, UN HITO EN LA HISTORIA HEBREA

Cambios grandes llegaron al pueblo escogido por Dios cuando Rebeca, esposa de Isaac, por obra de Dios mismo logró concebir dos hijos en su seno. El uno fue llamado Esaú y el otro Jacob.

Esaú recibió su nombre por su aspecto rojizo y de mucho pelo, el segundo lo llamaron Jacob y salió del vientre de su madre tomando por el talón a hermano.

Previo a su nacimiento fue dicho por Dios que el mayor serviría al menor, y que el uno sería más fuerte que el otro.

Pasó el tiempo y se definieron las personalidades, y las preferencias de los padres; el uno fue cazador, hombre de campo y favorito de su padre: Esaú, y el otro fue más sedentario y preferido de su madre: Jacob.

Pero hubo un día en que Esaú, rendido por el trabajo del campo, pidió a su hermano Jacob que le diera del guiso rojizo que tenía, dicho guiso eran lentejas. Ante tal suceso Jacob insistió a Esaú que vendiese su primogenitura y así fue, Esaú cambió todos sus derechos y herencia los cuáles tenía por ser el primer hijo, a Jacob por un pedazo de pan y un plato de lentejas.

La historia no termina ahí, lo anterior sólo fue la primera causa de este cambio transcendental en la historia de un pueblo. Lo siguiente sucedió gracias a Rebeca.

Cierto día Isaac, ya ciego, llamó a su hijo Esaú y le dijo que después de que él comiese del fruto de su caza le daría su bendición. Pero Rebeca escuchó la conversación y urgió a Jacob que trajera un cabrito del corral y que ella prepararía el plato preferido de su padre Isaac.

Jacob obedeció con duda ya que él era lampiño y no olía como su hermano, pero su madre arreglo esos problemas colocando sobre los brazos y cuello de Jacob la piel de los cabritos y vistiéndole con el mejor atavío de Esaú.

Jacob se acercó a su padre tomando la identidad de Esaú, Isaac incrédulo por la voz le dijo que se acercara para tocarle, y para su sorpresa fue la voz de Jacob y las manos de Esaú, y le bendijo.

Después comió y bebió, y como ya había dicho: “después de comer de tu caza te bendeciré”; le pidió le diera un beso y olió sus ropas e irremediablemente le bendijo.

Así fue como el pueblo hebreo cambió su simiente y su linaje dejando del lado al primogénito de hecho.

Pero la historia no termina ahí, pues Esaú llegó después y de la misma manera que Jacob, descubriendo así, el padre de ambos, el engaño de Jacob.

Para ello Esaú pidió y lloró la bendición de su padre, a lo cuál Isaac le dijo que serviría a su hermano, y que no estaría instalado en tierras fértiles, que viviría de su espada; pero eso sí, que cuando él quisiese podría liberarse del yugo y opresión de su hermano. Después, Esaú tratará de matarlo.

Así fue como dio un gran giro la historia del pueblo hebreo, mejor conocido como pueblo de Israel. Un gran hito que cambió la historia.


Por: Fernando Moctezuma